Miguel Ángel Sánchez tiene como objetivo profesional mejorar la eficiencia en el trabajo de aquellos con los que colabora.
Como formador imparte cursos orientados a futuros administrativos o directivos para que sepan desarrollar su carrera como un servicio al resto de la organización, aportando información adecuada y oportunamente.
Como asesor a empresas, aporto los conocimientos y herramientas que necesitan los administrativos y ayudo a los socios-directivos a analizar la información que genera el departamento de administración-contabilidad con la que adquieren un mejor conocimiento de su empresa y pueden tomar mejores decisiones.

domingo, 13 de mayo de 2012

GRATIS (y 2)

¿Quién no recuerda la campaña publicitaria de la famosa tarjeta de crédito? "...hay cosas que el dinero no puede comprar, para todo lo demás...."

Pues sí, a pesar de lo que escribí en mi anterior entrada, tengo claro que hay cosas que no se compran, que no se pueden obtener a cambio de dinero. En cierto modo podemos decir que son GRATIS.

¿Pero qué tipo de cosas son GRATIS y el dinero no puede comprar?

La misma campaña de anuncios da la respuesta, y lo bueno es que esas cosas que no son  gratis son las más importantes y las que más felicidad nos dan: la sonrisa de tus hijos cuando juegas con ellos, un beso, un abrazo, el frescor del césped recién cortado, el canto de los pájaros. La tranquilidad que da saber que tus padres y hermanos se interesan por tu salud.

Lo más importante es ver como hay gente que está dispuesta a darlo todo GRATIS, es decir, sin pedir nada a cambio: Sacerdotes y religiosos, misioneros y voluntarios preocupados por el tercer mundo, Cáritas, ...

En esta nueva vida que tenemos (no lo llamo crisis, por que no vamos a volver a lo que había hace unos años), son muchos los que se están dando cuenta de que lo importante no es lo que cuestan las cosas, sino lo que valen las personas. Es más importante tener a quien amar y con quien compartir los pocos bienes materiales que nos quedan, que estar rodeados de cosas y no tener con quien bromear, a quien abrazar.

Conforme nos vayamos recuperando de la verdadera crisis, la crisis moral y de valores, veremos a más gente compartiendo su dinero y su tiempo con los más necesitados. Ya se va notando en los bancos de alimentos, comedores sociales, etc... Esto es lo que nos hará grandes como sociedad y facilitará la recuperación económica tan deseada.